jueves, 9 de junio de 2011

Antídoto

Soñé con serpientes. Todas del color del oscuro césped que pisábamos descalzos e inocentes de su peligrosa presencia.

Alerté a todos de su existencia. Las señalé con el dedo, incluso las levanté por sus cabezas y mostré sus largos cuerpos babosos contonearse nerviosos. Pero todos estaban ciegos y solo reían y conversaban sobre sus cocteles de colores.

No recuerdo a nadie más. Solo a mí mismo levantar varias de ellas y arrojarlas lejos de la espesa grama húmeda que las escondía. Arrojé varias a través de una cerca que encerraba aquel jardín que, aunque no terminaba de reconocer, me resultaba muy familiar. Con algo de miedo, pero con firmeza, las arrojé afuera. Una a una.

Desperté preocupado, pero no por las serpientes. O por el miedo natural que estas causan. Sino por aquellos que se intoxicaron de distracción cuando llegó la hora de enfrentarlas y ahora permanecen encerrados en aquel jardín superfluo, sin conocer el antídoto.

por David Cerqueiro


Publicado en El Universal el 13 de junio de 2011: http://opinion.eluniversal.com/2011/06/13/antidoto.shtml

2 comentarios:

  1. Anónimo3:47 a.m.

    David
    Estas mejorando a grandes pasos

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  2. estan los que enfrentan sus miedos y son felices, y los que se creen felices evitando sus miedos. short but sweet. saludos.
    te invito a pasar por mi blog de relatos.

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